El Congreso de la República ha adjudicado un contrato valorado en Q5.7 millones para llevar a cabo diversas reparaciones en la fachada principal de su sede, situada en la 9.ª avenida, entre 9.ª y 10.ª calles de la zona 1.
Con una única oferta recibida, los trabajos serán realizados por la empresa Arcos Proyecciones, Sociedad Anónima, y se iniciarán en las próximas semanas.
La intervención abarcará tanto el frontispicio como otros sectores del histórico Palacio Legislativo, incluyendo muros internos y externos, ventanales, puertas, lámparas, letras metálicas y la terraza. Debido a que el edificio es un Patrimonio Cultural de la Nación, el contratista estará obligado a garantizar su conservación y evitar cualquier daño estructural, supervisado en todo momento por un arquitecto especializado.
Esta será la tercera restauración de la fachada en los últimos cinco años. En 2020 y 2022, bajo las presidencias de Álvaro Arzú Escobar y Allan Rodríguez, respectivamente, también se llevaron a cabo reparaciones similares.
Reparaciones fundamentadas en informes
Los trabajos actuales se sustentan en un informe de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) de 2017, que advertía sobre daños en la entrada principal del parlamento debido a la falta de mantenimiento. En dicho documento se señalaba la presencia de elementos arquitectónicos fracturados, situación que se agravó tras un incendio provocado durante una protesta en noviembre de 2020.
Fue al cierre de la gestión de Allan Rodríguez, en enero de 2022, cuando se oficializaron reparaciones en la fachada, puertas, ventanas y otras áreas afectadas por la manifestación. Dos años después, nuevas evaluaciones identificaron deterioros adicionales, lo que llevó al Congreso a licitar la obra en octubre pasado y adjudicarla a la empresa Arcos Proyecciones.
Restauración en el hemiciclo
Además, la empresa tendrá a su cargo la reparación de pisos y techos en el hemiciclo parlamentario, donde sesionan los diputados. Según los informes de Conred, este recinto cuenta con una estructura de cubierta de madera desmontable y otra de lámina galvanizada y vigas de acero, debilitadas por el paso del tiempo.
“La estructura portante del techo de madera presenta piezas apolilladas y grietas; además, hay filtraciones debido a la calidad de los materiales utilizados y la falta de mantenimiento”, indicó la Coordinadora en su informe de hace más de siete años. A pesar de estas advertencias, las directivas anteriores no priorizaron las reparaciones recomendadas.
